Macá Tobiano, la especie amenazada y recuperada gracias a la ciencia

Cómo hizo la ciencia para recuperar una especie amenazada y catalogada en peligro de extinción. Las características de estas aves acuáticas y su historia desde el momento en que fueron descubiertas hasta el actual trabajo de los investigadores.
El Macá Tobiano es una especie amenazada que recibió la ayuda necesaria y hoy tiene esperanzas de sobrevida.
La organización Aves Argentinas fue la encargada de difundir la información: un grupo de investigadores pudieron desarrollar crías en cautiverio que luego fueron liberadas a su hábitat natural.
Este logro fue especialmente celebrado por dos motivos. Por un lado, se trata de la recuperación de una variedad de aves cuya existencia podía peligrar. De igual modo, el hecho científico no tiene precedentes a nivel global.
Respecto a la proeza de estos profesionales, se supo que el trabajo es inédito. El proyecto consistió en la crianza de huevos. Una vez nacidas las crías se continuó el acompañamiento y, cuando llegaron al estadio de juveniles, fueron finalmente liberadas.
Todo el proceso, desde los ensayos científicos hasta la refaunación en el ambiente, ocurrió en el territorio argentino, más concretamente en la provincia de Santa Cruz.
El lugar específico en el cual los pichones llegaron al mundo fue la estación biológica Juan Mazar Barnet y la liberación ocurrió en el estuario del río Santa Cruz.
Esta especie amenazada lleva décadas de observación tras ser declarada en peligro de extinción. Entonces, fue a partir del 2012 cuando se verificó una situación especialmente crítica y en los últimos años directamente no se detectó reproducción de macás tobianos.
A partir de este diagnóstico se creó un equipo abocado a esta misión y comenzó el proyecto. Lo primero que se dispuso fue recolectar huevos.
Vale mencionar que estas aves tienen dos huevos por pareja, pero solo crían uno y el otro lo abandonan. A esos en particular apuntó el grupo…
El procedimiento continuó con la colocación en incubadoras en el laboratorio y la posterior alimentación de las crías ya nacidas.

Los profesionales con mucho conocimiento y estudio de esta variedad sumaron al cronograma el ítem de activar sus funciones vitales. De este modo, los llevaron al agua para que naden ya que esa es la forma en la cual funciona su aparato digestivo.
Todo el proceso llevó más de 60 días tras los cuales tres ejemplares jóvenes de más de 350 a 400 gramos estaban ya aptos para regresar al ecosistema.
El recorrido del macá tobiano, desde su descubrimiento hasta su recuperación
El macá tobiano es una especie amenazada que fue detectada por primera vez en el año 1974 por el naturalista Mauricio Rumboll en El Calafate, Santa Cruz.
Durante 25 años consecutivos la población de estas aves disminuyó su presencia en un 80 por ciento.
Fue en el 2009 cuando se comenzaron a pensar formas de ofrecer sobrevida a estas aves acuáticas, pero recién a comienzos de esta década se arribó a una posibilidad.
Esta variedad es endémica y autóctona de la Patagonia argentina y, por su lucha por subsistir, se convirtió en un emblema de los proteccionistas.
Su hábitat natural son los lagos y los humedales del sur en verano y en invierno se traslada hasta la Costa Atlántica.
En los últimos relevamientos previos a la experiencia de Aves Argentinas el estado de situación de la especie dejaba ver la amenaza y una condición muy crítica. De hecho, se obtuvo un registro de solo 800 ejemplares.
Uno de los peligros que enfrenta el Macá Tobiano es la introducción de especies invasoras que operan como depredadores. Algunos casos son el visón americano o la gaviota cocinera, entre otros
En igual sentido, como sucede en tantos casos, la crisis climática es un factor de riesgo. Sucede que el cambio de condiciones climáticas le afecta a su estado físico y a su salud. Situaciones como el cambio de los vientos o las sequías atentan contra su bienestar.
En este contexto de alertas de todo tipo, la reproducción de las aves comenzó a decrecer y, de allí en adelante, la crisis prosiguió hasta hoy.
En este punto de la historia intervinieron los científicos y las agrupaciones proteccionistas para intentar revertir este recorrido que parecía no tener buen fin.
Para el futuro cercano los planes son continuar el seguimiento mediante monitoreos, censos y todo tipo de acompañamientos para que esta especie amenazada pueda vivir.