Proponer “un paisaje óptimo“ puede sonar utópico, pero nada más concreto y científico: en ello se basa una investigación con datos recabados durante dos décadas por los biólogos Verónica Quiroga, Carlos De Angelo y Agustín Paviolo del CONICET en favor de los yaguareté y su hábitat.
En una conferencia organizada por Greenpeace, se colocó en el centro de la escena la situación del yaguareté.
Los científicos Verónica Quiroga, Carlos De Angelo y Agustín Paviolo, del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) presentaron la herramienta “Paisaje Óptimo para la Conservación del Yaguareté del Chaco, un recurso en el que confluyen los datos de dos décadas de trabajo para proteger la especie en peligro.
Yaguareté en peligro
Quedan solo 20 ejemplares de este felino en la región del Gran Chaco Argentino y solo el 3 % del área total de la región en la provincia argentina de Chaco, el norte, se encuentra en condiciones acordes para la vida del animal.
La expansión de la frontera agrícola está provocando la pérdida y fragmentación de los ecosistemas naturales, lo cual representa una de las mayores amenazas para la conservación de la biodiversidad en la Región Chaqueña.
Este problema, combinado con la amenaza de la caza, impacta de manera significativa en especies que necesitan vastos territorios para sobrevivir, como el yaguareté.
Proyecto Yaguareté
Desde el Proyecto Yaguareté se ha logrado identificar las áreas clave para la conservación y manejo del yaguareté y su hábitat. Se incluyeron áreas núcleo y áreas núcleo potenciales en un análisis de conectividad mediante corredores de costo mínimo, integrando estos corredores entre las áreas de manejo.
Los resultados se transformaron en un paisaje de conservación diseñado específicamente para la especie en la región. La idea es que sirva como objetivo para ser utilizado como herramienta de planificación territorial, manejo y toma de decisiones a nivel regional, apoyando las acciones de conservación del yaguareté y otras especies.
Greenpeace ha denunciado la situación crítica en la que se encuentra el yaguareté, a pesar de haber sido declarado Monumento Natural Nacional (Ley Nº 25.463 / 2001).
En Argentina, la población de yaguaretés se estima entre 250 y 300 individuos; sin embargo, la población más amenazada y en estado crítico se encuentra en la región del Gran Chaco, con menos de 20 individuos.
Hernán Giardini, coordinador de la Campaña de Bosques de Greenpeace, compartió que los científicos especialistas en yaguareté destacan la urgencia de detener la deforestación para asegurar la supervivencia de la especie en la región chaqueña.
“El trabajo deja claro cuál es el territorio que debe protegerse del avance de las topadoras. Esperamos que la Corte Suprema actúe con rapidez y detenga este ecocidio”.
Mamíferos en peligro crítico
La Sociedad Argentina para el Estudio de los Mamíferos (SAREM) clasifica al yaguareté como una especie en peligro crítico a causa de una sospechada reducción del 80% de su población en los últimos 20 años y al mantenimiento o aumento de las principales amenazas a la especie.
Para salvar esta especie emblemática y lo que representa para la biodiversidad, es fundamental proteger los bosques y poner freno a la deforestación.
Estamos al borde de perder al yaguareté, y cualquier acción para evitar su desaparición es esencial, pero es sabido que sin bosques, su supervivencia no será posible.
Para sobrevivir, cada macho necesita aproximadamente 40 mil hectáreas de bosque continuo y en buen estado de conservación.
A pesar de los esfuerzos legales, la pérdida de su hábitat original en el país ha reducido su territorio a un alarmante 5% de su extensión original en los últimos 200 años.
A nivel global, los científicos estiman que los jaguares ocupan menos del 50% de su territorio ancestral.
Para sobrevivir, cada macho necesita aproximadamente 40 mil hectáreas de bosque continuo y en buen estado de conservación.
Acciones y trabajo de Greenpeace para salvar el yaguareté
El 19 de julio de 2019, Greenpeace, junto con organizaciones ecologistas, presentó un amparo judicial ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación, en nombre y representación del yaguareté que habita en el Gran Chaco argentino.
Esta demanda, inédita en la historia jurídica argentina al ser realizada en nombre de una especie completa, busca garantizar la “Deforestación Cero” en los territorios donde vive la especie. Además, se solicita la conservación de los corredores biológicos del Gran Chaco, prohibiendo su degradación, fragmentación y deforestación, así como la recategorización de áreas protegidas.
El amparo, dirigido contra las provincias de Chaco, Salta, Formosa y Santiago del Estero, así como contra el Estado nacional por no cumplir la Ley Nacional de Bosques, también pide la anulación de las recategorizaciones ya otorgadas en Chaco y Salta.
Por otro lado, exige que se otorguen los fondos establecidos en la Ley de Bosques y la implementación de un Plan de Manejo sobre el yaguareté, conforme lo dispone la Ley Nacional Nº 25.463 que lo declara Monumento Natural Nacional.
Este mes, Greenpeace presentó los resultados de un trabajo científico ante el máximo tribunal del país, que aún debe analizar el amparo.
En un escrito reciente, se denunció la ilegalidad de la nueva Ley de Ordenamiento Territorial de Bosques Nativos de Chaco, que permitiría el desmonte en más de 1.200.000 hectáreas sin la participación de comunidades indígenas. Esta ley afectaría corredores de conservación de grandes mamíferos como el yaguareté.
El objetivo del reclamo es permitir que el yaguareté pueda seguir existiendo, disfrutando de sus ecosistemas y manteniendo su vida, salud, bienestar, alimentación, libertad, reproducción y seguridad.
A pesar de acciones judiciales previas en nombre de orangutanes y chimpancés en los zoológicos de Mendoza y CABA, esta es la primera vez que se realiza una acción de amparo en representación de una especie entera en la ecorregión del Gran Chaco argentino.