La organización ambientalista Greenpeace solicitó a la Corte Suprema de Justicia de la Nación una resolución urgente tras el reciente asesinato de un yaguareté en la provincia de Formosa. Este incidente ha generado una ola de indignación y preocupación entre los defensores del medio ambiente y la sociedad en general.
El yaguareté, una especie emblemática y en peligro crítico de extinción, fue víctima brutal de la caza furtiva recientemente en Formosa.
La noticia reviste vital importancia y resuena tanto en medios nacionales como internacionales con ecos de indignación por la irresponsabilidad y falta de respeto de los cazadores, pero sobre todo por el sentido que va mucho más allá del caso particular y las consecuencias para el medio ambiente y la especie, en tan frágil situación.
Se trataba de uno de los últimos cinco ejemplares conocidos en Formosa, que tras ser asesinado, fue despojado de su piel en un acto que subraya la vulnerabilidad y las amenazas constantes que enfrenta esta majestuosa criatura.
Aunque las autoridades provinciales han detenido a uno de los cazadores involucrados, la búsqueda de los demás continúa para poder dar con todos los responsables.
Un clamor por justicia y la necesidad urgente de reflexionar sobre protección ambiental
Noemí Cruz, coordinadora de la campaña de bosques de Greenpeace, declaró que desde Greenpeace, presentamos un amparo en defensa del yaguareté ante la Corte Suprema, y recientemente se han entregado contundentes informes que dejan en claro la forma en la que se viola la Ley de Bosques en las provincias, entre las que se encuentra Formosa.
“Esperamos un pronto pronunciamiento de la Corte“, dijo Cruz, “porque ya se demostró ampliamente cómo se arrasa con el hábitat y los últimos yaguaretés del Chaco argentino“.
La situación del yaguareté es tan relevante porque es justamente un reflejo de un problema mayor: la pérdida y fragmentación de los hábitats naturales debido al avance de la frontera agropecuaria.
El caso y el fenómeno de la caza ilegal no solo pone en riesgo la biodiversidad del país, sino que también afecta la salud de los bosques y la estabilidad de los ecosistemas.
La Importancia de la intervención judicial
En 2019, Greenpeace presentó un amparo en representación del yaguareté ante la Corte Suprema de Justicia, que el año pasado se declaró competente en la causa.
La organización espera que la Corte actúe con rapidez y firmeza para detener la extinción de esta especie. La situación es crítica y esperamos una rápida resolución de la Corte en esta causa, aseguran desde la organización.
Para que esto pueda encauzarse, lo primordial es que cuanto antes la audiencia pública.
Argentina debe erradicar las prácticas de caza ilegal, como también los desmontes. Y el rol de la Corte en detener la extinción de la especie es fundamental”, afirmó Cruz.
El yaguareté ha sido declarado Monumento Natural Provincial en Formosa desde 2018 y Monumento Natural Nacional desde 2001. A pesar de estas designaciones, su población sigue disminuyendo, y su hábitat se reduce día a día.
Un llamado a la acción
La trágica muerte de este yaguareté pone en relieve la necesidad urgente de una acción coordinada entre las autoridades judiciales, las organizaciones ambientalistas y la sociedad para proteger las especies en peligro y sus hábitats.
La supervivencia del yaguareté en el Gran Chaco argentino depende de medidas efectivas que detengan la caza furtiva y la destrucción de los bosques.
Greenpeace continúa su lucha incansable para preservar la biodiversidad y proteger a las especies más vulnerables.
La organización espera que la Corte Suprema escuche su llamado y tome decisiones que aseguren un futuro para el yaguareté y otros tesoros naturales de Argentina.